Imponente óleo sobre lienzo del siglo XVII que representa a Nuestra Señora de la Soledad, advocación mariana vinculada al título de Nuestra Señora de los Dolores, venerada ampliamente en la tradición de la Iglesia católica. La Virgen aparece en actitud de recogimiento y profunda espiritualidad, simbolizando el dolor de María tras la Pasión y Muerte de Cristo.
La obra se enmarca en la estética barroca, con un notable uso del claroscuro para acentuar la expresividad del rostro y transmitir la intensidad emocional de la escena. Los pliegues del manto y la delicadeza del modelado reflejan la influencia de los grandes talleres religiosos de la época, concebida como imagen de devoción y contemplación.
Dimensiones: 154 X 104 cm.